Páginas

martes, 24 de agosto de 2010

Real Madrid ...un mar de dudas y un Angel


El trofeo Bernabeu reposa ya en las arcas del Real Madrid, quien lo conquisto despues de ganar esta noche 2 goles a cero al conjunto penarol; pero el madrid vuelve a desencantar, se supone que hoy jugaba de titular el once de gala de Mourinho, y si es asi; lo vamos a tener muy dificil en la liga, y sobre todo ante un Barcelona que convense, y que juega muy bien como conjunto.

Un Madrid sin alma, sin propuesta, sin ganas es lo que se vio en el Santiago bernabeu hoy, salvan la noche Angel Di Maria y Pedro Leon que se les vio mas participativos asi como el gol de gran factura de Di Maria.

El ensayo quedó en casi nada. Mourinho presentó un dibujo con dos mediocentros, dos pasadores, un punta y un multiusos, Cristiano. El portugués buscó fortuna en ambas bandas y ahí multiplica su peligro, pero anduvo sin compañía y acabó ofuscándose. El mal humor deprecia mucho su juego. Ozil fue una sombra, sin participación ni sitio. Anduvo de un lado a otro sin dejar siquiera una perla. La regularidad es su asignatura pendiente. Mourinho tiene trabajo para conseguir que haga casi siempre lo que hace fantásticamente bien a ratos. Tampoco Canales encontró insipiración en el amistoso, que discurrió al ritmo pausado y aburrido que le interesó al Peñarol. A Higuaín apenas le llegó nada y sólo Khedira ofreció cierto dinamismo, aunque no quepa esperar de él suficiente motor como para mover con agilidad al equipo. Xabi Alonso también está corto de puesta a punto, Lass ofreció poco como lateral y sólo el entusiasmo de Marcelo y el vigor de Sergio Ramos salieron a flote de forma racheada.

El Peñarol no apretó casi nada, pero en sus asomos de atrevimiento puso en evidencia a Carvalho, un central cuya veteranía le pone bajo sospecha. Antes que él, y con mejor cartel, estuvo ahí Fabio Cannavaro y no le entró por el ojo al Bernabéu pese a su intachable profesionalidad.

Con extremos

Tras el descanso entraron los aspirantes, algunos al borde de la titularidad. Y se la ganaron. Pedro León y Di María le pusieron alas al Madrid. Nunca están de más los extremos. Y desde allí salvó al menos el resultado el Madrid. El argentino tomó un balón en su banda, limpió a su par con un acelerón y sorteó dos obstáculos con fintas impecables antes de mandar la pelota a la red. Al fin asomó ese uno contra uno que anunció Maradona y que nunca apareció durante el Mundial.

Di María tuvo la chispa que siguió faltándole al equipo, que incluso perdió a Gago, lesionado en la rodilla. Mourinho probó a dos canteranos (Juanfran y Mateos), ensayó con Canales y Granero como mediocentros y quiso ver a Cristiano por detrás de Benzema, que sigue sin apretar a Higuaín. Ya en el descuento abrochó el marcador Van der Vaart, en penalti cometido sobre él mismo. Su celebración tuvo música de despedida. El trofeo Bernabéu se quedó en Madrid, pero la afición blanca ni durmió tranquila ni se subió al carro de Mourinho.

No hay comentarios:

Publicar un comentario